Las competencias digitales se enfocan en las habilidades digitales necesarias para la sociedad en general, mientras que las competencias digitales docentes son cruciales para adaptar la enseñanza a la era digital. Permiten a los educadores utilizar eficazmente la tecnología en el aula, mejorar la participación de los estudiantes y prepararlos para un mundo laboral digital, también fomentan la innovación pedagógica, la personalización del aprendizaje y la mejora continua de la calidad educativa.
El Marco Europeo para las Competencias Digitales de los Educadores (DigCompEdu) es un referente internacional que proporciona un análisis detallado de estas competencias, con un modelo de progresión en niveles adaptable a todas las etapas educativas.
En el Informe Retos de la Competencia Digital del Profesorado Iberoamericano de Educación Superior I se realiza un análisis basado en siete áreas, incluyendo las seis de DigCompEdu y una adicional según el modelo OpenEdu.
Una de las áreas es la de Contenidos Digitales debido a su importancia ha transformado la forma en que vivimos, trabajamos, nos comunicamos y accedemos a la información. Su importancia radica en su capacidad para mejorar la eficiencia, la conectividad y el acceso a recursos clave en diversos aspectos de la vida moderna.
Para los docentes la competencia en contenidos digitales va más allá de simplemente diseñar y producir sus propios recursos. Implica la habilidad para seleccionar, reutilizar, gestionar, modificar y compartir de manera efectiva. Al utilizar recursos digitales en la enseñanza, es crucial considerar las características y necesidades específicas de los estudiantes para promover un aprendizaje efectivo. Además, considerar aspectos esenciales como la propiedad intelectual y los derechos de autor al reutilizar o compartir recursos.
El informe analiza esta competencia digital y la desglosa en tres subcompetencias:
Seleccionar recursos Esta habilidad nos enseña la relevancia de conocer cómo «identificar, evaluar y elegir recursos digitales para la enseñanza y el aprendizaje» (Redecker, 2017, p. 20), considerando factores como el contexto, los enfoques pedagógicos, los objetivos y las particularidades de los estudiantes.
Crear y modificar recursos:
Los docentes deben crear, modificar y reutilizar recursos, entendiendo las licencias abiertas. Esto puede hacerse individual o de manera colaborativa, enriqueciendo el catálogo de materiales para los estudiantes. Es esencial mantener el enfoque considerando el contexto de enseñanza y las necesidades de aprendizaje.
Gestionar, proteger y compartir recursos
En la gestión de recursos digitales, es esencial considerar licencias, propiedad intelectual y derechos de autor. Enfocándonos en la protección de datos personales de los estudiantes, los docentes tienen la responsabilidad clave de garantizar la seguridad de la información en el entorno académico.
La tecnología enriquecerá la experiencia educativa y preparará a los estudiantes para el mundo digital. Integrar contenidos digitales en las sesiones de clases permite potenciar la participación, la innovación y el aprendizaje interactivo.
Este resumen fue creado con la asistencia de ChatGPT, una inteligencia artificial desarrollada por OpenAI. La información se procesó y resumió utilizando este modelo de lenguaje avanzado para ofrecer una visión concisa del tema.