Cada 21 de abril se conmemora el Día Mundial de la Creatividad y la Innovación, una fecha que destaca el valor de imaginar nuevas posibilidades y generar cambios positivos. Esta efeméride nos invita a reconocer el papel clave de las ideas en el desarrollo de soluciones que impactan distintos aspectos de la sociedad. En el ámbito educativo, nos recuerda que el aprendizaje no debe limitarse a la transmisión de contenidos, sino abrirse a la exploración, la reflexión crítica y la construcción activa de conocimiento. Innovar no es solo aplicar herramientas tecnológicas, sino cuestionar lo establecido para generar propuestas con sentido y propósito.

A través de enfoques creativos, es posible enfrentar desafíos actuales con soluciones integrales. Por ejemplo, el diseño de espacios públicos inclusivos puede responder a las metas del ODS 11 (Ciudades y comunidades sostenibles), mientras que iniciativas digitales que promuevan el bienestar emocional contribuyen al ODS 3 (Salud y bienestar). Estas acciones, impulsadas por la creatividad, evidencian cómo las ideas se convierten en motores de cambio cuando están conectadas con los retos reales del entorno.

En la educación superior, fomentar la innovación implica generar condiciones para que docentes y estudiantes experimenten, colaboren y propongan. Desde el uso de metodologías activas hasta proyectos vinculados con el contexto, la creatividad permite resignificar el acto de aprender y enseñar. Se trata de formar personas capaces de analizar críticamente, adaptarse al cambio y aportar con soluciones responsables.

En este día, celebremos el poder de imaginar un mundo distinto y actuar para hacerlo posible. Porque cada idea que nace en un aula, cada propuesta que surge desde la curiosidad y la empatía tiene el potencial de transformar realidades. Apostar por la creatividad en la educación es sembrar futuro.

En este video de BBVA Aprendemos Juntos, el reconocido publicista Luis Bassat, considerado uno de los mayores expertos mundiales en creatividad, comparte su visión sobre cómo fomentar la creatividad y el pensamiento crítico en la educación. Con una trayectoria destacada en la publicidad, Bassat ofrece reflexiones valiosas sobre el papel de estas habilidades en el aprendizaje y la enseñanza.

Con profundo respeto, la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC) rinde homenaje a la vida y obra de Mario Vargas Llosa, uno de los más grandes exponentes de la literatura universal. Su partida deja un vacío inmenso en el mundo de las letras, pero también nos deja una herencia invaluable: una obra lúcida, apasionada y profundamente humana que seguirá marcando generaciones.

En honor a su memoria, la UPC ofrece un curso gratuito y abierto al público que explora su trayectoria, pensamiento y contribución a la literatura hispanoamericana. Esta iniciativa busca no solo reconocer su legado, sino también invitar a nuevos lectores a descubrir o redescubrir la riqueza de su escritura.

mario vargas llosa

Este curso especial, titulado “Vargas Llosa: Entre palabras y pasiones”, propone un recorrido integral por la evolución narrativa del Nobel de Literatura: desde sus primeras novelas cargadas de crítica social, hasta sus obras más recientes, donde el amor, la política y la libertad se entrelazan con maestría.

A través de una mirada crítica y contextualizada, los participantes conocerán las tres etapas clave de su narrativa, así como el impacto cultural y político de su producción literaria. Este homenaje académico ofrece una experiencia formativa pensada para honrar su legado con la profundidad que merece.

Detalles del curso

  • Modalidad: 100% online
  • Duración: 16 horas
  • Costo: Gratuito
  • Certificación: Al finalizar el curso
  • Inscripción: Completa el formulario aquí
  • Condiciones:  Las inscripciones estarán abiertas hasta el 30 de abril o hasta agotar 100 cupos.
  • Los participantes inscritos tendrán hasta el 31 de mayo para completar el curso.

Un vínculo que nos honra

En el año 2001, Mario Vargas Llosa fue distinguido como profesor honorario de nuestra universidad, un reconocimiento que selló un lazo académico y simbólico que hoy seguimos valorando con gratitud y orgullo. Su contribución intelectual ha sido fuente de inspiración para nuestra comunidad, y este curso busca continuar ese legado, compartiéndolo con todos los interesados en la literatura y el pensamiento crítico.

Con esta iniciativa, la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas reafirma su compromiso con la cultura, la educación y la memoria de quienes han transformado el mundo a través de las ideas. Te invitamos a ser parte de este merecido tributo a Mario Vargas Llosa, una figura que permanecerá viva en sus libros, en nuestras aulas y en el corazón de millones de lectores en todo el mundo.

Los monumentos y sitios históricos no son solo piedras, muros o esculturas. Son la memoria viva de quienes fuimos, la voz silenciosa de culturas que aún nos hablan y el reflejo de lo que podemos llegar a ser. Cada 18 de abril, el mundo celebra el Día Internacional de los Monumentos y Sitios, una fecha que nos invita a detenernos, mirar y escuchar esas historias que nos rodean, muchas veces sin que lo notemos.

En el ámbito de la innovación educativa, esta fecha es una invitación poderosa: ¿cómo podemos hacer que nuestros estudiantes se conecten emocional y activamente con el patrimonio? ¿Cómo logramos que lo valoren, lo cuiden y lo integren a su aprendizaje? La respuesta está en abrir nuevas puertas al conocimiento, combinando tradición y tecnología.

La lista de patrimonios de la humanidad es extensa y diversa, reflejo de la riqueza cultural y natural del mundo. Algunos ejemplos emblemáticos son el Centro Histórico de Cusco en Perú, las Pirámides de Egipto, el Parque Nacional de Yellowstone en Estados Unidos, la Gran Muralla China y la Catedral de Aquisgrán en Alemania. Cada uno de ellos nos cuenta una historia única y representa solo una parte del vasto legado que aún queda por descubrir y preservar. Detalle de la lista del patrimonio cultural del Perú.

Hoy en día, gracias a herramientas como Google Arts & Culture, estudiantes pueden recorrer virtualmente sitios como Machu Picchu, la Acrópolis o el Taj Mahal, sin salir del aula. A través de la realidad aumentada, pueden ver cómo eran estos espacios en su época de esplendor. Con la realidad virtual, pueden “viajar en el tiempo” y vivir la historia en primera persona. Incluso proyectos de gamificación educativa permiten explorar ciudades históricas resolviendo retos o misiones colaborativas.

Estas experiencias no solo enriquecen el aprendizaje: fomentan el respeto, la identidad y el orgullo cultural. Y están completamente alineadas con el ODS 11: Ciudades y comunidades sostenibles, que promueve la conservación del patrimonio como base para sociedades inclusivas y resilientes.

Educar para preservar no es solo enseñar fechas o nombres. Es despertar emociones, generar vínculos y formar ciudadanos comprometidos con su historia y su entorno. Porque cuidar lo que somos también es imaginar lo que podemos ser.

Desde las aulas físicas hasta los entornos virtuales, cada espacio educativo puede convertirse en un puente hacia el pasado y una semilla para el futuro. Por eso, invitamos a docentes a explorar nuevas formas de enseñar historia y cultura, integrando la tecnología como aliada. E invitamos a estudiantes a dejarse sorprender, a mirar con otros ojos esos lugares que tal vez siempre estuvieron ahí… pero que aún tienen mucho por contar.

Porque cuando la educación se conecta con la memoria, la innovación cobra sentido. Y juntos, construimos un presente que honra lo que fuimos, para imaginar lo que podemos llegar a ser.

Texto trabajado con el apoyo de ChatGPT.

Cada 7 de abril, el mundo conmemora el Día Mundial de la Salud, una fecha impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para visibilizar los principales desafíos en torno al bienestar global. Este 2025, el lema elegido es “Comienzos saludables, futuros esperanzadores”, un llamado a fortalecer la salud materna y neonatal como base para un futuro más justo y sostenible. En este contexto, la educación se posiciona como una herramienta clave para generar cambios duraderos en la salud de las personas y las comunidades.

La educación en salud no solo promueve hábitos saludables, sino que también empodera a las personas para tomar decisiones informadas sobre su bienestar físico y mental. Desde la infancia, incorporar contenidos sobre nutrición, salud emocional, prevención de enfermedades y autocuidado en los entornos educativos permite desarrollar una ciudadanía más consciente, crítica y resiliente. En el caso de la salud materna, el acceso a información clara y oportuna puede marcar la diferencia entre un embarazo seguro y uno en riesgo.

Cuidar la salud de otros requiere primero cuidar la propia. Es fundamental promover nuestro bienestar físico y mental, ya que ambos aspectos trabajan en conjunto para asegurar un óptimo desempeño en todas las áreas de la vida. Hoy más que nunca, es momento de reflexionar, comprendernos y educarnos en el autocuidado, especialmente quienes dedicamos nuestra vida al cuidado de los demás. Promover hábitos saludables es dar el primer paso hacia una vida plena.
Jack Avila Velásquez, docente de la carrera de Medicina

Además, la formación continua de profesionales del ámbito educativo y sanitario fortalece el trabajo interdisciplinario en favor de la salud comunitaria. Escuelas, universidades y espacios de aprendizaje informal se convierten así en escenarios estratégicos para fomentar una cultura de prevención y cuidado mutuo. La innovación educativa, por su parte, permite diseñar experiencias significativas que acerquen los temas de salud a estudiantes de todas las edades y contextos, utilizando recursos digitales, tecnologías inmersivas o metodologías activas.

Todo esto se conecta directamente con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3: “Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades”. Para alcanzar esta meta, es indispensable invertir no solo en servicios de salud, sino también en estrategias educativas que promuevan estilos de vida saludables y el acceso equitativo al conocimiento. En este Día Mundial de la Salud, reafirmamos el compromiso de la educación como aliada fundamental para construir futuros más saludables y esperanzadores.

Texto trabajado con el apoyo de ChatGPT y Jack Avila Velásquez

El 26 de marzo, en el campus Monterrico de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC), se llevó a cabo la Pinning Ceremony, un evento en el que cuatro estudiantes fueron reconocidos oficialmente como University Innovation Fellows. La ceremonia fue dirigida por la vicerrectora académica, Milagros Morgan y Jorge Bossio, director de Aprendizaje Digital e Innovación Educativa. El evento contó con la presencia de autoridades académicas, familiares y los estudiantes Fabiola Espinoza Inoñan (Ingeniería de Software), Diana León Quispe (Administración y Marketing) , Irvin Soto Orbezo (Ingeniería Electrónica) y Milagros Chumbimuni Mayo (Ingenieria de Gestión Empresarial), quienes recibieron sus pines en presencia de la Decana de la Facultad de Ingeniería, Rosario Villalta, así como Carlos Torres Sifuentes director de la carrera de Ingeniería de Gestión Empresarial y Willy Ugarte director de la carrera de Ingeniería de Software, como símbolo de su compromiso con la transformación educativa y el liderazgo en innovación.

University Innovation Fellows (UIF) es una comunidad global impulsada por la d.school de la Universidad de Stanford, que empodera a estudiantes para liderar la innovación y transformación educativa en sus universidades.

Ser un fellow significa asumir el reto de ser agente de cambio, liderando iniciativas innovadoras, proponiendo soluciones a desafíos reales y promoviendo una cultura de aprendizaje activo. A través de esta experiencia, desarrollan habilidades clave como liderazgo, creatividad y pensamiento crítico, generando un impacto positivo y sostenible en su entorno.

Además, nos complace anunciar que nuestros Fellows están próximos a viajar a la Universidad de Twente para participar en el Meet Up 2025, un espacio donde compartirán experiencias con estudiantes de diferentes instituciones a nivel global. Confiamos en que vivirán una experiencia enriquecedora y que aplicarán todo lo aprendido en sus proyectos, cuyo objetivo es generar un impacto positivo en su comunidad académica.

Descubre los testimonios de miembros de la comunidad UPC que vivieron la experiencia del Meet Up en ediciones anteriores.

Texto trabajado con el apoyo de ChatGPT

Cada 30 de marzo, el mundo conmemora el Día Internacional de Cero Desechos, una iniciativa de la ONU que busca promover prácticas sostenibles para reducir la generación de residuos y fomentar la economía circular. En un contexto donde el consumo excesivo y la mala gestión de desechos impactan gravemente nuestro planeta, esta fecha nos invita a reflexionar sobre cómo cada acción individual puede marcar la diferencia.

Este compromiso está directamente relacionado con el Objetivo de Desarrollo Sostenible 12 (Producción y Consumo Responsables), que nos reta a replantear nuestros hábitos para minimizar el desperdicio y optimizar el uso de recursos. Desde rechazar plásticos de un solo uso hasta practicar el compostaje o reparar en lugar de desechar, cada pequeño cambio suma para construir un futuro más sostenible.

Las universidades, como centros de innovación y aprendizaje, tienen un papel clave en este movimiento. Pueden promover políticas de reducción de residuos, fomentar el uso de materiales reutilizables en sus campus, integrar la educación ambiental en sus programas académicos y desarrollar proyectos de investigación que generen soluciones para la gestión eficiente de residuos. Además, pueden inspirar a sus estudiantes a convertirse en agentes de cambio dentro de sus comunidades.

Adoptar un estilo de vida de cero desechos no solo ayuda al medio ambiente, sino que también genera beneficios económicos y sociales. La reutilización y el reciclaje impulsan nuevas oportunidades de empleo y modelos de negocio sostenibles. Además, contribuyen a la reducción de emisiones de carbono, ayudando en la lucha contra el cambio climático. Al respecto, en la UPC, Carlos Rojas Terán comenta:

“Como docente de Ingeniería Industrial, valoro esta fecha, porque nos recuerda el impacto que nuestras decisiones tienen en el entorno. Los ingenieros industriales tenemos la responsabilidad de diseñar procesos más eficientes, sostenibles y circulares, que minimicen el desperdicio desde su origen. A través de la mejora continua, la innovación y el pensamiento sistémico, contribuimos a construir una sociedad más consciente y comprometida con el uso responsable de los recursos.”

Cada acción cuenta. En este Día Internacional de Cero Desechos, reflexionemos sobre nuestro impacto y tomemos medidas concretas para vivir de manera más responsable. ¿Qué cambio implementarás hoy para contribuir a un mundo con menos residuos?

Texto trabajado con el apoyo de ChatGPT y Carlos Rojas Terán

Cada 22 de marzo, el mundo celebra el Día Mundial del Agua, una iniciativa de las Naciones Unidas para destacar la importancia del agua dulce y promover su gestión sostenible. Este año, bajo el lema “Conservación de los glaciares”, se enfatiza la necesidad urgente de proteger estos reservorios naturales de agua dulce que están desapareciendo a un ritmo alarmante debido al cambio climático, estos son esenciales para el equilibrio climático y el suministro de agua dulce, entre otros beneficios.

Los glaciares, que almacenan aproximadamente el 70% del agua dulce del planeta, son fundamentales para el suministro de agua potable, la agricultura y la producción de energía limpia. Su acelerado derretimiento no solo amenaza la disponibilidad de agua, sino que también provoca desastres naturales como inundaciones y deslizamientos de tierra, afectando a miles de millones de personas en todo el mundo.

La educación desempeña un papel crucial en la concienciación y acción frente a esta problemática. Incorporar en los programas educativos contenidos sobre la importancia de los glaciares y el impacto de su pérdida puede motivar a las nuevas generaciones a adoptar prácticas más sostenibles. Herramientas innovadoras como simulaciones interactivas y proyectos comunitarios de monitoreo ambiental pueden enriquecer este aprendizaje.

El agua es esencial para los organismos vivos, para regular las condiciones climáticas y es un eje transversal para todos los ecosistemas. Asimismo, es necesaria para la producción de alimentos y la generación de energía.
Es un recurso escaso y del que todos hacemos uso, por ello, es importante crear conciencia y en cada una de nuestras actividades y acciones promover su uso racional y una gestión sostenible en cada una de las industrias.
Mercedes Gómez Lazarte, directora de la carrera de Ingeniería Ambiental en la UPC

Además, fomentar la investigación y el desarrollo de tecnologías para mitigar el deshielo y gestionar eficientemente los recursos hídricos es esencial. Al integrar estos enfoques en la educación, no solo se contribuye al Objetivo de Desarrollo Sostenible 6 (Agua limpia y saneamiento), sino también al ODS 13 (Acción por el clima), promoviendo una ciudadanía informada y comprometida con la conservación de nuestros glaciares y la sostenibilidad del planeta.

Fuentes:
Naciones Unidas
Banco Mundial
Statista
ODS ONU

Texto trabajado con el apoyo de ChatGPT y Mercedes Gómez Lazarte

Mag. Blanca Jesús Joo Chang

Entre pasillos se escucha un “soplaré y soplaré, y tu casa derribaré”;  es inevitable sentir temor cuando se camina por un lugar desconocido, o cuando la duda está rondando constantemente. Algunos sienten que la tecnología complica situaciones y otros que viene a resolver todos los problemas, y en algún punto, la necesidad del equilibrio entre una postura y otra, pasa desapercibida. 

Esta frase nos pone en alerta, estado en el cual siempre debemos estar, pero no con temor, sino con seguridad y esperanza. Pensemos en cómo está nuestra “casa”, la frase sale de este cuento popular, nos exhorta a hacer un “alto” urgente. La velocidad de los cambios y actualizaciones nos sobrepasa y se lleva todo lo que hay a su paso; y con ello las posibilidades de procesar y reflexionar cada situación vivida.

La IA está reestructurando la forma en que aprendemos, accedemos al conocimiento y enseñamos, de manera que las “casas” pueden colapsar ante los avances tecnológicos.

Derribar esas casas no necesariamente implica destrucción, sino la oportunidad de reconstruir estructuras más sólidas y adaptadas a la era digital. La IA no tiene la intención de eliminar lo existente, sino de hacerlo evolucionar.

No sólo se ven involucrados los estudiantes y docentes, la IA también está cambiando el rol de los padres como guías en el aprendizaje de sus hijos. “Derribar la casa” implica la necesidad de adaptar las dinámicas familiares para integrar la tecnología de manera positiva, colaborando en la educación de sus hijos en un entorno cada vez más digitalizado, equilibrando las situaciones con y sin tecnología con un sentido y propósitos claros.

Necesitamos desarrollar la autonomía, el pensamiento Crítico y la Inteligencia emocional como columnas y de manera transversal, valores de Fe que guíen nuestras decisiones y acciones.

Para fomentar la acción interactiva entre éstos, sugiero implementar los seminarios socráticos que permitirán desarrollar también la personalización del aprendizaje y el aprendizaje adaptativo en un contexto virtual, porque cada “casa” es diferente. Asimismo, podemos usar la IA como asistente en el proceso de debate en la preparación y durante el proceso, con ello podremos ver esta frase “soplaré y soplaré y tu casa derribaré”, no como “derribar al oponente”, sino como identificar en uno mismo, lo que se requiere derrumbar.  Aquí un gráfico sobre cómo podemos implementar IA en el contexto arriba descrito, considerando un escenario virtual y presencial de clase:

blanca joo 1
blanca joo 2

Que este “derribar” no sea visto como una amenaza, sino como una oportunidad para reconstruir un sistema educativo más robusto, flexible y capaz de responder a los desafíos del siglo XXI.

El 14 de marzo se celebra el Día Internacional de las Matemáticas, una fecha proclamada por la UNESCO que nos invita a reflexionar sobre el papel fundamental que esta disciplina desempeña en nuestras vidas. Más allá de los números y ecuaciones, las matemáticas están presentes en la toma de decisiones diarias, en la resolución de problemas y en el desarrollo del pensamiento lógico. Desde la planificación de un presupuesto hasta la comprensión de fenómenos naturales, esta ciencia se convierte en una herramienta clave para interpretar el mundo y afrontar sus desafíos.

En el ámbito educativo, las matemáticas no solo transmiten conocimientos, sino que fortalecen habilidades esenciales como el razonamiento crítico, la creatividad y la capacidad de analizar información. Su enseñanza es crucial para preparar a los estudiantes en un mundo cada vez más digitalizado, donde la programación, la inteligencia artificial y el análisis de datos son competencias altamente valoradas. Fomentar el aprendizaje de las matemáticas con metodologías innovadoras, como la gamificación o la realidad aumentada, puede hacer que su estudio sea más atractivo y accesible para todos.


Las matemáticas están llenas de secretos por descubrir, demostrar y comprender. En este video de Aprendemos Juntos 2030, el matemático Antonio J. Durán nos invita a explorar su historia, su impacto y la importancia de enseñarlas de forma más creativa.

La importancia de las matemáticas en la educación está estrechamente vinculada con el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 4: Educación de calidad. Garantizar que todos los estudiantes adquieran habilidades matemáticas sólidas contribuye a la equidad en el acceso a oportunidades educativas y laborales. En un mundo donde la alfabetización matemática es cada vez más relevante, es fundamental que las instituciones educativas promuevan enfoques inclusivos y efectivos para su enseñanza, reduciendo así las brechas de aprendizaje. En este Día Internacional de las Matemáticas, celebremos su impacto en la educación y en la vida cotidiana. Apostemos por estrategias innovadoras que despierten el interés por esta disciplina y que permitan a los estudiantes comprender su utilidad más allá del aula. Porque formar ciudadanos con pensamiento lógico y capacidad analítica no solo contribuye a su desarrollo personal, sino que también fortalece sociedades más preparadas para enfrentar los retos del futuro.