Por Silvana Balarezo

Bett 2025, celebrado en Londres del 22 al 24 de enero, reunió a educadores y expertos en tecnología para explorar el futuro de la educación. La Inteligencia Artificial (IA) fue protagonista con herramientas que personalizan el aprendizaje y mejoran la accesibilidad. Learning Lemur destacó por su capacidad de retroalimentación inmediata en matemáticas, mientras que Microsoft presentó un ecosistema de IA para optimizar la enseñanza e inclusión.

El evento también abordó la inclusión educativa, con startups que desarrollan soluciones desde los colegios, involucrando a estudiantes desde los 9 años en la resolución de problemas reales. Destacó el robot educativo Tien Kung de UBTECH, diseñado para enseñar robótica e IA en educación superior.

Las interacciones con profesionales de distintos países permitieron conocer enfoques innovadores. El modelo HyFlex en universidades de Londres mostró alineación con tendencias globales, y las presentaciones de Microsoft evidenciaron cómo la tecnología transforma la enseñanza-aprendizaje.

Bett 2025 también puso en discusión la transformación de los espacios físicos de aprendizaje, resaltando la importancia de modelos híbridos y flexibles. Este debate sigue abierto y es clave para repensar la integración tecnológica en la educación.

Uno de los paneles más inspiradores abordó la integración de la IA en la enseñanza. Microsoft expuso cómo la IA puede mejorar la accesibilidad y equidad, impulsando su aplicación en tecnologías accesibles, enseñanza personalizada y pensamiento de diseño desde edades tempranas.

El evento abordó desafíos como equidad, inclusión y transformación digital, con soluciones enfocadas en accesibilidad y plataformas que conectan a educadores globalmente. Sin embargo, se notó la ausencia de soluciones centradas en evaluación, un aspecto clave para la educación digital.

Bett 2025 dejó una agenda llena de ideas y contactos para seguir explorando innovaciones educativas. Es momento de actuar, aplicar estos aprendizajes y seguir impulsando una educación más inclusiva y efectiva. ¡Juntos, construyamos el futuro del aprendizaje!

Esta semana se llevó a cabo el IFE Conference 2025, un evento organizado por el Tecnológico de Monterrey que congregó a más de 3,000 profesionales, docentes y autoridades de instituciones educativas de diversos países, con un enfoque particular en América Latina. Este encuentro se ha consolidado como un espacio clave para el intercambio de experiencias y la exposición de iniciativas innovadoras en educación superior, tecnología educativa (EdTech) e innovación empresarial. Su propósito es conectar estas iniciativas para fortalecer los lazos entre instituciones educativas, proveedores de soluciones tecnológicas, investigadores y docentes, impulsando así un proceso de transformación en la educación superior. Además, el evento se ha convertido en una plataforma estratégica para quienes trabajan en este ámbito, permitiéndoles descubrir nuevas formas de abordar los desafíos educativos en la región.

Un aspecto fundamental del IFE Conference 2025 es su estrecha colaboración con organizaciones de gran relevancia, como la UNESCO, redes de universidades como MetaRed, y otras asociaciones que promueven la innovación educativa. Lo que distingue a este evento no es únicamente la presentación de soluciones tecnológicas o metodológicas, sino el énfasis en la evidencia y el impacto real que estas iniciativas generan en el proceso de aprendizaje. En esta edición, se ha dado especial atención a la reducción de brechas educativas, tanto en la transición de la educación básica a la educación superior en América Latina como en la conexión entre la educación superior y la industria. En este contexto, la participación del sector empresarial es clave para garantizar que los avances educativos respondan a las necesidades del mundo laboral y social en constante evolución.

Uno de los temas más discutidos ha sido el aprendizaje a lo largo de la vida (Lifelong Learning) y cómo el avance tecnológico está generando una demanda creciente de actualización continua en todos los campos del conocimiento. La necesidad de mantener a los profesionales al día con los cambios en la sociedad y la industria se ha convertido en un desafío prioritario para las instituciones educativas.

Cabe destacar que profesionales peruanos han participado activamente en este evento, lo que representa una gran oportunidad para las instituciones educativas del país. Su presencia no solo les permite conocer de primera mano las tendencias globales en educación e innovación, sino también establecer conexiones estratégicas que pueden traducirse en nuevas iniciativas y alianzas en beneficio del ecosistema educativo peruano. Espacios como el IFE Conference 2025 nos recuerdan la importancia de estos encuentros en la construcción de un futuro educativo más inclusivo, dinámico y adaptado a los desafíos del siglo XXI.

Texto trabajado con el apoyo de Jorge Bossio, asistente al IFE Conference 2025 y ChatGPT.

Cada 4 de febrero, el Día Internacional de la Fraternidad Humana nos recuerda la importancia de construir un mundo basado en el respeto, la solidaridad y la convivencia pacífica. Pero ¿qué significa realmente la fraternidad en el ámbito educativo? Más allá del aula, es el motor que impulsa una educación más inclusiva, donde docentes y estudiantes colaboran para generar impacto en sus comunidades. La universidad no solo debe transmitir conocimientos, sino también formar ciudadanos comprometidos e interesados en construir puentes y transformar su entorno, más empático y justo para todos.

La fraternidad en la educación se vive a través de metodologías que fomentan la cooperación y el aprendizaje cooperativo. Espacios de trabajo en equipo, que se enriquecen con la experiencia y el aporte de los talentos de cada uno de los integrantes, proyectos con impacto y responsabilidad social y el uso de tecnologías, como herramientas que conectan a estudiantes de distintas realidades, que permiten que la diversidad y la divergencia se convierta en una fortaleza. La clave está en propiciar experiencias donde el conocimiento no solo se construya, sino que también se comparta con un propósito común: mejorar la vida de las personas y el entorno, celebrando las diferencias.

En un mundo interconectado, la educación no puede quedarse solo en las aulas. Necesitamos formar ciudadanos digitales responsables, capaces de dialogar y trabajar con personas de diferentes culturas, historias, experiencias de vida y perspectivas. La inclusión de la fraternidad humana en el currículo, la promoción de la ciudadanía global y el desarrollo de competencias socio emocionales son esenciales para que la educación trascienda las fronteras y genere cambios reales en la sociedad.

¿Cómo podemos llevar la fraternidad humana a la educación?

  • Fomentar el aprendizaje colaborativo: Diseñar actividades y proyectos donde los estudiantes trabajen juntos para resolver problemas reales.
  • Promover espacios de diálogo intercultural: Organizar encuentros, debates o foros que impulsen el respeto por la diversidad y la inclusión.
  • Impulsar el voluntariado y la innovación social: Vincular la formación académica con iniciativas que generen impacto en comunidades vulnerables.
  • Aprovechar la tecnología para conectar y compartir: Usar plataformas digitales para crear redes de conocimiento y apoyo mutuo.
  • Promover el desarrollo de habilidades blandas: Desde el aula se puede potenciar la resolución de conflictos, el asertividad, la tolerancia a la frustración, la resiliencia entre otras.

Al respecto María Teresa Diaz, psicóloga y jefa de Orientación Psicopedagógica de la UPC nos comenta:

El docente tiene un rol muy importante en el aula de clase, dado que no solo es un facilitador de aprendizajes, sino que a través de sus actitudes, puede modelar habilidades sociales, puede inspirar valores como el respeto frente a las diferencias e inspirar a ser un líder de cambio. El docente es el primer agente que puede favorecer un clima emocional mas justo y digno donde todos se sientan seguros.

La educación tiene el poder de transformar vidas, y la fraternidad es el puente que nos permite construir un futuro más justo y solidario. ¿Estás listo para llevar la fraternidad más allá del aula? ¿Este año te comprometes a ser más fraterno con tus compañeros de trabajo y tus estudiantes? Te animamos a hacerlo, todo comienza por una decisión.

Texto trabajado con el apoyo de ChatGPT y María Teresa Diaz Calderón

El 26 de enero se celebra el Día Internacional de la Energía Limpia, una fecha establecida por las Naciones Unidas para reconocer la importancia de la transición hacia fuentes de energía sostenibles y accesibles para todos. En el contexto universitario, este día representa una oportunidad clave para reflexionar sobre el papel que tienen las instituciones educativas en la promoción de la energía limpia y la sostenibilidad ambiental. Las universidades, como centros de formación e innovación, están llamadas a liderar iniciativas que fomenten la investigación, el desarrollo de tecnologías limpias y la concienciación sobre el impacto ambiental de nuestras acciones cotidianas.

Los retos que enfrentan las universidades en este ámbito son diversos y van desde la necesidad de actualizar sus planes de estudio para incluir contenidos sobre energías renovables, eficiencia energética y sostenibilidad, hasta la implementación de infraestructuras más ecológicas en sus campus. Además, es fundamental que las instituciones promuevan una cultura de sostenibilidad entre sus comunidades, incentivando prácticas responsables en el uso de los recursos y explorando soluciones innovadoras para reducir su huella de carbono.

Los docentes desempeñan un papel crucial en este proceso, ya que son agentes de cambio que pueden inspirar a sus estudiantes a interesarse por la energía limpia a través de proyectos de investigación aplicada, actividades prácticas y espacios de debate sobre las tendencias y desafíos del sector energético. Asimismo, pueden incorporar en sus clases casos de éxito y colaboraciones con empresas y organizaciones que trabajan en la transición energética, ofreciendo así una visión más integral y motivadora.

Por su parte, los estudiantes también pueden contribuir de manera significativa a la causa de la energía limpia participando en iniciativas como hackathones de innovación sostenible, desarrollo de propuestas para hacer más eficiente el consumo energético en sus campus, o incluso promoviendo campañas de sensibilización dentro de la comunidad universitaria. La colaboración entre docentes y estudiantes es clave para generar impacto real y duradero, alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, en particular el ODS 7: Energía asequible y no contaminante. En este Día Internacional de la Energía Limpia, es un buen momento para comprometerse con acciones concretas que construyan un futuro más sostenible para todos. En este sentido, el 2024, la carrera de Relaciones Internacionales de la UPC organizó el III Congreso Internacional sobre Cambio Climático y Sostenibilidad: Explorando Soluciones para un Futuro Sostenible. Este evento abordó, entre otros temas, el contexto legal del cambio climático, los retos políticos y económicos internacionales, y las nuevas tendencias en energías renovables, como la fotovoltaica, eólica y verde. Estas reflexiones fortalecen la visión de una sostenibilidad integrada en la educación, la investigación y la acción institucional.

Asimismo, en sus instalaciones, la UPC destaca el cambio de luminarias LED de bajo consumo, la instalación de sensores de movimiento en diversas áreas, el funcionamiento de paneles solares para temperar la piscina del campus Villa, y la incorporación de principios de arquitectura sostenible que maximizan el aprovechamiento de la luz natural. Estas acciones reflejan el compromiso hacia la sostenibilidad.

Texto trabajado con el apoyo de ChatGPT y la Dirección de Sostenibilidad y Responsabilidad Social de la UPC

En un mundo donde la inteligencia artificial (IA) transforma la manera en que enseñamos y aprendemos, la Comunidad de Inteligencia Artificial en la Educación continúa su compromiso de generar espacios de diálogo y exploración sobre el impacto de esta tecnología en la enseñanza. El viernes 17 de enero a las 10:00 a. m. se dio inicio el tercer año de sesiones virtuales semanales, consolidándose como un espacio que promueve el debate y la formación en IA aplicada a la educación.

Desde su creación, la comunidad ha reunido a docentes, especialistas y personas interesadas en comprender y aprovechar la IA en los procesos educativos. Con más de 2,200 participantes a lo largo de los últimos dos años, las «Sesiones de IA» se han convertido en un espacio clave para el intercambio de ideas, el aprendizaje colaborativo y la exploración de herramientas innovadoras.

Cada sesión ofrece un enfoque diverso, abarcando desde la ética y los sesgos en la IA hasta demostraciones de herramientas y experiencias de implementación en el sector educativo. Este año, el objetivo es seguir fortaleciendo la discusión, promoviendo una visión integral que no solo explore el uso de la tecnología, sino que también fomente una reflexión crítica sobre su impacto en la educación.

Las sesiones son abiertas y gratuitas, permitiendo la participación de cualquier persona interesada en la intersección entre inteligencia artificial y educación. Con un panel de expertos invitados y un enfoque en el aprendizaje activo, la comunidad sigue apostando por un modelo de intercambio dinámico y enriquecedor.

Si eres docente, investigador o simplemente un entusiasta de la tecnología, este espacio es para ti. Si deseas participar, escribe un correo a gabriela.alvarez@upc.pe

Mira las grabaciones de las sesiones pasadas:

El 24 de enero, celebramos el Día Internacional de la Educación, una fecha proclamada por las Naciones Unidas para destacar el papel fundamental de la educación como derecho humano y motor del desarrollo sostenible. Este año, el lema que nos convoca, «IA y educación: preservar la autonomía en un mundo automatizado«, nos invita a reflexionar sobre los desafíos y oportunidades que plantea la inteligencia artificial (IA) en el ámbito educativo.

La irrupción de la IA en nuestras vidas ha transformado profundamente la manera en que aprendemos y enseñamos. Desde herramientas personalizadas de aprendizaje hasta plataformas automatizadas de evaluación, las aplicaciones de esta tecnología prometen mejorar la eficiencia y accesibilidad de la educación. Sin embargo, también surgen inquietudes relacionadas con la pérdida de la autonomía en los procesos de aprendizaje, la privacidad de los datos y el rol de los docentes.

Formación en competencias digitales y uso ético de la tecnología

En un contexto donde la IA juega un papel cada vez más relevante, es esencial que estudiantes y docentes desarrollen competencias digitales que les permitan utilizar estas herramientas de manera crítica y responsable. Esto incluye habilidades para evaluar la fiabilidad de las fuentes de información, gestionar datos de manera segura y comprender el impacto ético de las decisiones tecnológicas.

Preservar la autonomía del aprendizaje en un mundo automatizado requiere que los usuarios de la tecnología sean capaces de discernir cuándo y cómo utilizarla para potenciar sus habilidades, sin depender exclusivamente de ella. Este equilibrio entre la tecnología y el pensamiento crítico es clave para garantizar que la IA sea una herramienta de empoderamiento, no de dependencia. Conversamos al respecto con Lea Sulmont y nos comentó:

Todas estas oportunidades y desafíos requieren que el docente use una ruta de tránsito en sus prácticas profesionales, en las que va a tener que desaprender ciertas prácticas y aprender otras, lo cierto es que el rol del docente siempre va a ser necesario para la formación de las personas, pero aquellos docentes que no hagan ese tránsito, que no incorporen la IA de manera creativa, responsable y ética, seguramente van a tener que ser reemplazados en los proyectos educativos. Es una oportunidad pero es un desafío que hay que emprender ahora.
Lea Sulmont Haak
Docente de la carrera de Educación y Gestión del Aprendizaje de la UPC

El rol de los docentes y el aprendizaje ético

Uno de los retos más importantes es garantizar que la adopción de la IA en la educación respalde, en lugar de suplantar, la capacidad de los estudiantes para tomar decisiones informadas y críticas. La tecnología debe ser una herramienta complementaria que potencie la creatividad, el pensamiento crítico y la resolución de problemas, habilidades esenciales para enfrentar los desafíos de un mundo en constante cambio.

En este contexto, el rol de los docentes se torna más crucial que nunca. Como mediadores entre la tecnología y los estudiantes, los educadores deben estar capacitados para integrar herramientas de IA de manera efectiva, promoviendo además un uso ético de estas. Esto implica enseñar a los estudiantes no solo cómo utilizar la tecnología, sino también a cuestionar su impacto en la sociedad y en sus propias vidas.

Hacia una educación inclusiva y ética

La IA también tiene el potencial de democratizar el acceso a la educación, eliminando barreras geográficas y socioeconómicas. Sin embargo, esta transformación debe estar guiada por principios éticos que aseguren la equidad, la inclusión y el respeto por la diversidad. Las instituciones educativas, así como los desarrolladores de tecnologías, tienen la responsabilidad de diseñar soluciones que promuevan la justicia social y el bienestar colectivo.

En la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC), nos unimos a esta reflexión global reafirmando nuestro compromiso con la innovación educativa y el desarrollo de competencias digitales responsables. Apostamos por una educación que combine lo mejor de la tecnología con el poder transformador del aprendizaje humano.

Este Día Internacional de la Educación, celebremos juntos el potencial de la inteligencia artificial como aliada en la construcción de una sociedad más equitativa y consciente, donde la autonomía, el uso ético de la tecnología y el sentido crítico sigan siendo los pilares de la formación de las futuras generaciones.

Texto trabajado con el apoyo de ChatGPT

La educación está en constante evolución, y los docentes desempeñan un papel crucial en este proceso. Prepararse para enfrentar los desafíos del 2025 es fundamental para brindar a los estudiantes una enseñanza relevante, inclusiva y adaptada a las necesidades del mundo digital y globalizado. La integración de tecnologías, la personalización del aprendizaje y el fortalecimiento de competencias blandas son herramientas clave para asegurar que los futuros ciudadanos estén bien preparados para un entorno en rápida transformación. Al hacerlo, los docentes no solo mejoran su práctica educativa, sino que también promueven un aprendizaje significativo y equitativo para todos.

Te compartimos 10 estrategias clave para enfrentar los desafíos del 2025:

1. Formarse en competencias digitales
Adquirir habilidades tecnológicas esenciales para integrar herramientas digitales y de inteligencia artificial en la enseñanza.

2. Adaptarse a la personalización del aprendizaje
Diseñar estrategias educativas que respondan a las necesidades individuales de los estudiantes, aprovechando datos y analíticas educativas.

3. Fortalecer el pensamiento crítico y la creatividad
Promover actividades que desafíen a los estudiantes a resolver problemas y generar ideas innovadoras, incluso utilizando tecnología.

4. Asegurar la inclusión educativa
Implementar prácticas pedagógicas que consideren a estudiantes con diferentes capacidades, orígenes y niveles de acceso a recursos digitales.

5. Fomentar el uso ético de la tecnología
Enseñar a los estudiantes a utilizar herramientas digitales de manera responsable, cuidando su privacidad y evitando el plagio.

6. Participar en comunidades de aprendizaje
Colaborar con otros docentes para intercambiar experiencias, metodologías y soluciones a los desafíos actuales.

7. Integrar la educación en habilidades blandas
Incorporar competencias como la comunicación, el trabajo en equipo y la adaptabilidad en los planes de estudio.

8. Prepararse para el aprendizaje híbrido
Dominar herramientas y metodologías que permitan combinar la enseñanza presencial y virtual de manera efectiva.

9. Involucrar a las familias en el proceso educativo
Mantener canales abiertos de comunicación con las familias para fortalecer el apoyo al aprendizaje desde el hogar.

10. Abrazar el cambio como una oportunidad
Adoptar una mentalidad abierta hacia las innovaciones tecnológicas y pedagógicas, viéndolas como aliados para enriquecer la educación.

Juntos, podemos construir un entorno donde la innovación y el aprendizaje transformen vidas y preparen a los estudiantes para enfrentar los desafíos del mañana.

La inteligencia artificial (IA) está revolucionando el ámbito educativo al personalizar el aprendizaje, optimizar recursos y promover la inclusión. Esta tecnología permite adaptar los contenidos a las necesidades individuales, automatizar tareas administrativas y desarrollar habilidades fundamentales como el pensamiento crítico y la autonomía. Asimismo, mejora la accesibilidad para personas con discapacidades y fortalece la gestión educativa mediante el análisis de datos.

De cara a 2025, los principales desafíos incluyen garantizar la privacidad de los datos, capacitar a los docentes en el uso adecuado de estas herramientas y cerrar la brecha digital para evitar mayores desigualdades. La implementación ética y equitativa de la IA es fundamental para que su impacto sea realmente transformador en el sector educativo.

En su reciente publicación titulada «Del miedo a la oportunidad: Poner la inteligencia artificial al servicio de la educación«, Jaime Saavedra y Ezequiel Molina profundizan en el impacto de la IA en la educación y los retos asociados a su adopción. Los autores, expertos en educación del Banco Mundial, analizan los temores comunes que suscita la IA, especialmente en relación con su efecto en la equidad, la eficacia del aprendizaje y el rol de los docentes. Sin embargo, destacan que esta tecnología, implementada con responsabilidad y estrategia, tiene el potencial de convertirse en un catalizador para cerrar brechas educativas y potenciar el aprendizaje.

A través del análisis de cuatro preguntas clave, Saavedra y Molina abordan las inquietudes de educadores, padres y responsables políticos en América Latina. Desde la carencia de condiciones mínimas en muchas escuelas hasta los riesgos de dependencia tecnológica, los autores proponen soluciones concretas, como la capacitación docente en competencias digitales, el fortalecimiento del talento local en IA y la creación de marcos normativos que garanticen la soberanía de los datos. Subrayan, además, la importancia de integrar la IA como un aliado que enriquezca el trabajo docente, fomente el pensamiento crítico y amplíe el acceso a una educación de calidad. Este enfoque no solo responde a los desafíos actuales, sino que asegura que la IA esté verdaderamente al servicio de los valores fundamentales de la educación.

Trabajar en la educación es clave porque transforma vidas, reduce desigualdades y construye un futuro más justo y sostenible para todos.

El 4 de enero, Día Internacional del Braille, proclamado por la ONU, conmemora el nacimiento de Louis Braille, creador del sistema que lleva su nombre y que ha sido un pilar fundamental para la alfabetización de personas con discapacidad visual. Este día nos invita a reflexionar sobre la importancia de garantizar la accesibilidad en todos los ámbitos, especialmente en la educación superior, donde el acceso equitativo al conocimiento debe ser una prioridad. La inclusión en las aulas universitarias no solo depende del uso del Braille, sino también de la integración de herramientas digitales que potencien las capacidades de los estudiantes con discapacidad visual.

En la actualidad, la inteligencia artificial (IA) está transformando la manera en que las personas con discapacidad visual interactúan con el mundo, abriendo nuevas puertas a la inclusión. Herramientas como los lectores de pantalla basados en IA, aplicaciones de reconocimiento de texto y asistentes virtuales permiten que los estudiantes accedan a materiales educativos de forma rápida y eficaz. Tecnologías como Optical Character Recognition (OCR), integradas en dispositivos móviles y computadoras, convierten textos impresos en audio o Braille, facilitando la lectura y el aprendizaje. Estas innovaciones no solo contribuyen a la accesibilidad académica, sino también a la autonomía de las personas con discapacidad visual.

La tecnología también desempeña un papel crucial en la interacción social y profesional de los estudiantes con discapacidad visual. Plataformas como Be My Eyes, que conecta personas ciegas con voluntarios mediante IA, y sistemas de navegación asistida basados en realidad aumentada, permiten a los usuarios moverse de manera independiente en entornos complejos, como campus universitarios. Estas soluciones digitales no solo responden a necesidades prácticas, sino que también fortalecen la inclusión social y la participación activa de las personas con discapacidad en la vida universitaria.

El Día Internacional del Braille nos recuerda que la tecnología debe ser una herramienta para derribar barreras, no para crearlas. Las instituciones de educación superior tienen la responsabilidad de integrar tecnologías accesibles y formar a sus docentes en el uso de estas herramientas. Solo mediante un compromiso genuino con la accesibilidad y la inclusión será posible garantizar que todos los estudiantes, sin importar sus capacidades, puedan alcanzar su máximo potencial.

En la UPC, comprometida con la inclusión, cuenta en sus bibliotecas con libros en braille a disposición de los estudiantes. Asimismo, la Editorial UPC ha publicado libros en el sistema Braille. Desde las carreras, estudiantes de Ingeniería de Sistemas realizaron un proyecto de teclado en Braille para las tabletas.

Referencias bibliográficas:

  1. World Health Organization. (2023). Assistive technology for people with disabilities.
    Recuperado de https://www.who.int
    https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/assistive-technology
  2. United Nations. (2022). International Day of Braille: Promoting inclusion and accessibility.
    Recuperado de https://www.un.org
    https://www.un.org/en/observances/braille-day
  3. American Foundation for the Blind. (2023). Innovations in assistive technology: Enhancing accessibility for visually impaired individuals. Recuperado de https://www.afb.org

Gracias al apoyo de herramientas de inteligencia artificial, se ha logrado enriquecer esta publicación.